Queridos amigos,

Nos dirigimos a ustedes a fin de informarles que los próximos dos sábados, 21 y 28 de diciembre, 2024, no se celebrarán Misas en la capilla de Saladaeng (aunque no se interrumpirá la publicación de las lecturas correspondientes a este gozoso tiempo litúrgico).
Resumimos, por lo tanto, nuestras Eucaristías en el horario habitual de las 18:30 hs., el próximo 4 de enero, 2025, con la celebración de la Solemnidad de la Epifanía del Señor.
(Quienes deseen concurrir a misa hasta que nos volvamos a encontrar el próximo año, pueden dirigirse a la iglesia de Holy Redeemer (misas en thai y en inglés solamente). En el enlace que les compartimos a continuación encontrarán indicaciones de cómo llegar, como también los horarios de las misas: https://www.holyredeemerbangkok.org/. ¡Muchas gracias!
Hermanos y hermanas, en medio de las tinieblas de la tierra, hoy en Belén se ha encendido una llama inextinguible; en medio de la oscuridad del mundo, hoy prevalece la luz de Dios, que «ilumina a todo hombre» (Jn 1,9). ¡Hermanos y hermanas, alegrémonos por esta gracia! Alégrate tú, que has perdido la confianza y las certezas, porque no estás solo, no estás sola: ¡Cristo ha nacido por ti! Alégrate tú, que has abandonado la esperanza, porque Dios te tiende su mano; no te señala con el dedo, sino que te ofrece su manito de Niño para liberarte de tus miedos, para aliviarte de tus fatigas y mostrarte que a sus ojos eres valioso como ningún otro. Alégrate tú, que en el corazón no encuentras la paz, porque se ha cumplido la antigua profecía de Isaías: «Un niño nos ha nacido, un hijo nos ha sido dado […] y se le da por nombre: […] Príncipe de la paz» (9,5).
….. Que este periodo de preparación sea ocasión para convertir el corazón; para decir “no” a la guerra y “sí” a la paz; para responder con alegría a la invitación del Señor que nos llama, como había profetizado Isaías, «a llevar la buena noticia a los pobres, / a vendar los corazones heridos, / a proclamar la liberación a los cautivos / y la libertad a los prisioneros» (Is 61,1).
Estas palabras se cumplieron en Jesús (cf. Lc 4,18), nacido hoy en Belén. Acojámoslo, abrámosle el corazón a Él, el Salvador. Abrámosle el corazón a Él, el Salvador, que es el Príncipe de la paz.
Papa Francisco
«Urbi et Orbi», Navidad 2023
Para cada uno de ustedes que nos siguen cada semana aquí en Bangkok y desde distintos lugares del mundo, les agradecemos habernos acompañado a lo largo de este año y esperamos poder continuar unidos en oración y, por este medio, compartiendo la fe siguiendo las huellas de Jesús, el Dios-con-nosotros y al amparo de María, nuestra Madre, en el 2025.

Unidos en oración, unidos en el Amor,
llenos de gozosa esperanza y animados por la fe
nos hallamos una vez más frente al
portal de Belén para recibir al Niño Jesús,
la sublime manifestación del Amor de nuestro Padre Eterno,
y les deseamos a ustedes y a sus familias
una muy feliz y bendecida Navidad
y un año 2025 caminando junto a Cristo, guiados por su Gracia,
y celebrando el Jubileo como Peregrinos de Esperanza y signos de su paz.
En Jesús, María y José,
Comunidad Católica Latina en Bangkok
2024


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